¿Necesitas un préstamo para poder ir de vacaciones en verano?
Los créditos de viaje de verano son la elección que cada vez elige más gente, pero también hay trampas, lo mejor es no caer en ellas. Cuando se acerca el verano y las ganas de desconectar del día a día son fuertes, llegan las ganas de buscar vuelos, consultar un guía y repasar el último viaje de un amigo o familiar. Aparece la tentación de pedir un préstamo para pagar las vacaciones. Considere todos los pros y los contras antes de hacerlo.
Según un estudio de la firma de gestión de deuda Kruk, el 15 por ciento de los españoles dijeron que tenían problemas para lidiar con la deuda para financiar sus vacaciones de verano. Según estas cifras, no sorprende que el 40% de los encuestados admitiera que pediría un préstamo rápido para pagar sus vacaciones de verano. De ellos, el 31% lo haría para cubrir gastos más allá de lo que pueden permitirse en ese momento, y el 29% aprovecharía la oferta de financiación de una agencia de viajes si la encontrara interesante.
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Debes conocer el TAE para saber exactamente cuanto pedir
Para todos los que se estén planteando solicitar un préstamo para financiar sus vacaciones de verano, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomienda primero averiguar con exactitud cuánto dinero se ha solicitado y cuánto se pagará por él. Puede parecer obvio, pero implementar lo primero no siempre es fácil, y lo segundo rara vez se describe. Antes de solicitar cualquier crédito, debes saber que tienes capacidad suficiente para pagar las cuotas.
No debemos olvidar que no es el interés nominal el que determina el precio de un préstamo, sino la llamada tasa anual equivalente (TAE), que incluye no solo los intereses sino también las comisiones y otros cargos. Este concepto servirá como elemento de comparación entre diferentes préstamos. En última instancia, desde nuestra perspectiva, es importante no caer en el sobreendeudamiento, es decir, solo debemos pedir préstamos si realmente podemos pagarlos, señaló la OCU. Si realmente quiere arriesgarse con un préstamo para irse de vacaciones, al menos debe tener en cuenta que, la deuda más corta posible es la mejor opción. Esto significa la cancelación anticipada de la deuda pendiente tan pronto como se disponga de liquidez.
¿Cómo lograr un expediente impecable para conseguir un préstamo?
Es cierto que las entidades pueden establecer comisiones por amortizaciones anticipadas. No obstante, estos «no podrán ser superiores al 1% del importe del prepago si el plazo pendiente de pago supera el año», explicó un portavoz de la OCU. Por el contrario, para plazos más cortos -que son habituales en las tarjetas- se pagará una comisión no superior al 0,5%.
¿Hay alternativas a un crédito para vacaciones?
Una de las preguntas que la OCU recomienda hacerse antes de solicitar un préstamo vacacional es si hay otras formas de financiación disponibles. Si el 60,7% de las personas en la encuesta de Kruk usó sus ahorros para pagar sus vacaciones, el 33,7% usó una tarjeta de crédito y el 15,6% obtuvo financiación de una agencia de viajes, préstamos de familiares o adelantos de salario son otras de las opciones.
Una portavoz de la OCU dijo que los llamados créditos flash o microcréditos -préstamos de montos muy pequeños que se otorgan de forma casi automática- pueden ser muy costosos, por lo que esta opción parece ser la menos recomendable y, con diferencia, la más cara.
¿Te vas de vacaciones con deudas? Según un estudio, si la práctica es poco habitual entre los españoles, un 13% afirma que este año sí tiene intención de solicitar un préstamo para cubrir gastos especiales en viajes y ocio. Sin embargo, dada la falta de recursos económicos directos para hacer frente a los gastos derivados de las vacaciones, la urgencia de conseguir financiación es una muy mala asesora, sobre todo si se financia a toda costa.
Dependerá de la cantidad de deuda que tenga acumulada una persona, si la carga financiera anual aumenta debido a la financiación de las vacaciones, es necesario considerar hasta qué punto los ingresos de una persona o familia pueden soportar este aumento del coste. Por ello, los expertos recomiendan andar con cuidado y seguir unos sencillos pero importantes pasos previos para endeudarse cuando no se puede evitar pero sí despejar la mente.
Consejos al solicitar un crédito para las vacaciones de verano
Consulta tu situación financiera
Lo primero que debes hacer es revisar tus finanzas, por un lado, tener claros tus ingresos, gastos y, por otro lado, tus activos y pasivos. ¿Objetivo? Primero, evaluar si puedes aumentar tu deuda y luego conocer el impacto de tener que devolver el préstamos en tu situación financiera. Adicionalmente, esta revisión te dará la oportunidad de obtener una lista de activos que eventualmente te permitirán considerar la posibilidad de vender cualquiera de ellos como un plan de financiación alternativo.
Crea un presupuesto
Tener un presupuesto exhaustivo de todos los gastos en los que incurrirás durante la temporada es lo más importante. Esta es la única forma de saber cuánto necesitas realmente y si puedes pagarlo en tu situación. Es muy importante hacer los números antes de pedir un préstamo, para que sea lo más ajustado posible y no nos endeudemos por encima de nuestras posibilidades.
Echa un vistazo de cerca al contrato
Si, tras una cuidadosa evaluación de tu situación personal y económica, llegas a la conclusión de que puedes permitirte las vacaciones, debes prestar especial atención a los detalles del préstamo. ¿A qué debes prestar especial atención? Primero, que la cantidad se ajusta a lo que planeas pagar. No tiene sentido pedir una cantidad mayor porque esto aumentaría el total financiado. En segundo lugar, presta atención al período / plazos del préstamo. ¿Tiene sentido pasar mucho tiempo pagando lo que has pedido para tus vacaciones? Probablemente no, porque si necesitamos refinanciar las vacaciones del próximo año y ya tenemos un préstamo del año anterior, será más difícil que nos lo concedan.
Ten cuidado con las tasas de interés
Actualmente, las empresas financieras ofrecen una gran variedad de productos, entre ellos microcréditos y préstamos rápidos, que aportan una pequeña cantidad de capital y que se pueden utilizar de forma casi inmediata. Las tasas de interés de estos productos suelen ser mucho más altas que las de las empresas tradicionales (bancos). También hay que prestar especial atención a las comisiones y a todos los cargos asociados a la financiación, y revisar los productos que están asociados, si es que existen, para evitar sorpresas. Es decir, el dato relevante será la TAE (o tipo de interés anual equivalente, que incluye no sólo el tipo de interés, sino también el resto de comisiones), no el tipo de interés nominal (TIN).
Compara todas las opciones
Un error muy común es aceptar la primera oferta que nos hacen sin compararla con otros préstamos que nos ofrecen otras financieras. Tanto es así que solo el 21,3% de los encuestados (una muestra de más de 2.100 personas representativas de la población española) afirma comparar diferentes opciones antes de contratar un préstamo. Somos capaces de comparar viajes, precios de coches o compañías telefónicas, pero la financiación nos sigue costando. La prisa por conseguir financiación nos lleva a elegir la primera opción que nos ofrecen, lo que puede ser un error, porque potencialmente podríamos encontrar una mejor tarifa en otra compañía.